Solicitarán que Colombia sea incluida en la lista de países llamados a comparecer ante la Comisión de Normas-
Este año la CUT, la CGT y la CTC elaboraron conjuntamente el informe con el que actuarán y presentarán la realidad laboral y sindical de Colombia en el marco de la 101ª Conferencia Internacional del Trabajo que inició sus deliberaciones el día de hoy en Ginebra, Suiza.
El informe que elaboraron las tres organizaciones sindicales, todas afiliadas a la CSA y a la CSI, tiene como punto de partida las recomendaciones de la Misión de Alto Nivel de la OIT que visitó a Colombia en febrero de 2011, las cuales son contrastadas con la realidad colombiana actual.
Se trata de un documento de 58 páginas en el que se hace un análisis general de los problemas laborales y sindicales colombianos a la luz de la normatividad OIT, con sus conclusiones. Además incluye dos anexos : el primero es un listado de los 55 asuntos legislativos laborales pendientes de ser adecuados en Colombia, y los obstáculos que lo impiden ; y el segundo reseña los últimos casos de violencia antisindical. (Para ver informe completo haga clic aquí).
En el informe se afirma que la cultura antisindical en Colombia se ejerce de varías formas, alejada del discurso que predican los representantes de nuestro gobierno en diferentes instancias internacionales como la OIT. “Cuando los empleadores y el Gobierno de Colombia participan de los debates de la OIT, adquieren compromisos que posteriormente no son cumplidos o dilatan su acatamiento”, dice en un aparte. Además se insiste en la necesidad del diálogo social tripartito serio y efectivo para superar la falta de voluntad política por parte del Estado y de los empresarios en el cumplimiento de los compromisos adquiridos con los y las trabajadoras y con la OIT.
Las principales conclusiones del informe :
1- Las recomendaciones de la Misión de Alto Nivel que visitó a Colombia en febrero de 2011, en su mayoría, se encuentran pendientes de cumplir. Es decir, continúa la ausencia de diálogo social con resultados efectivos, la violencia contra los sindicalistas y la impunidad de los crímenes, los actos de discriminación antisindical, la falta de adecuación de la legislación a las normas y doctrina de la OIT, la escasa asistencia técnica de este organismo Internacional.
2- Algunas medidas adoptadas por el gobierno no logran aún producir cambios en la realidad laboral. Medidas como la creación del Ministerio del Trabajo, el aumento de fiscales e investigadores para los casos de violencia contra sindicalistas, normas para controlar la intermediación de cooperativas de trabajo asociado, las sentencias de la Corte Constitucional que ordenan tomar medidas sobre las nominas paralelas en el Estado, las ordenes de prestación de servicios, contratación civil, no logran reducir la informalidad, la precariedad laboral, las prácticas antisindicales y el déficit de trabajo decente.
3- En Colombia aún estamos lejos de poder ejercer sin obstáculos la libertad sindical. Persiste la cultura antisindical, la precarización y dificultades de asociación y negociación colectiva, y la falta de inspección fuerte y eficiente para la protección de los derechos.
4- El gobierno colombiano suscribió en el 2006 un acuerdo tripartito, en el 2011 suscribió un acuerdo sobre derechos laborales con el gobierno de los Estados Unidos, ese mismo año firmó un acuerdo laboral con la CGT y la CPC para implementar un conjunto de medidas en temas laborales, y recientemente expidió un decreto para garantizar el derecho a la negociación colectiva para empleados públicos (que es un avance pero deja mucho que desear). Así las cosas, el sindicalismo colombiano espera que el gobierno cumpla a cabalidad con estos compromisos con los trabajadores y la comunidad internacional.
5- La violencia antisindical, que en Colombia ha sido sistemática, ha afectado al conjunto de los y las trabajadoras, y ha vulnerado derechos colectivos, debe significar una reparación al colectivo del movimiento sindical.
Con fundamento en las anteriores consideraciones, las 3 centrales sindicales solicitarán que Colombia sea incluida en la lista de países llamados a comparecer ante la Comisión de Aplicación de Normas de la 101ª Conferencia de la OIT, a fin de evaluar la situación actual del sindicalismo y los trabajadores colombianos.