La comunidad de Tauccamarca clama por
justicia en Perú: plaguicida de Bayer mató 24 niños indígenas
El 22 de octubre de 1999, 44 niños y niñas de una escuela de la comunidad
peruana de Tauccamarca, en el departamento de Cuzco, resultaron intoxicados por
consumir un desayuno contaminado con un plaguicida altamente tóxico, denominado
Paratión, producido por la empresa Bayer. 24 de estos niños murieron y los
demás quedaron con graves secuelas neurológicas y problemas de aprendizaje.
La Red de Acción en Agricultura Alternativa (RAAA) de Perú denuncia ante el TPP
a la empresa alemana Bayer por su violación a la Constitución peruana, y
especialmente su atropello a los derechos que defienden la vida, la integridad
moral, psíquica y física, el libre desarrollo y el bienestar, en la comunidad
de Tauccamarca, en el departamento de Cuzco. La
organización también responsabiliza por las graves violaciones a los derechos
humanos allí sucedidas al Servicio Nacional de Sanidad Agraria (SENASA) del
Ministerio de Agricultura peruano.
Bayer introdujo el Paratión en Perú y lo comercializó específicamente para
cultivos andinos de pequeños y medianos agricultores,
El Paratión es considerado por la Organización Mundial de la Salud como un
plaguicida extremadamente tóxico, y en Perú estaba limitado el registro de
plaguicidas con este principio activo, mientras que su comercialización estaba
restringida por el SENASA. Por la no fiscalización de estas restricciones es
que los demandantes consideran que el SENASA también tiene responsabilidad
sobre la intoxicación y muerte de los niños de Tauccamarca.
La organización denunciante considera además que Bayer continúa violando las
leyes peruanas al no retirar de comercialización sus productos tóxicos, lo que
implica una grave amenaza a la salud de la población de Tauccamarca, además del
daño ambiental que provocan los agrotóxicos.
El Primer Juzgado Penal de Cuzco condenó al profesor Isaac Villena Nuñez, que
entregó los alimentos contaminados para el desayuno, por homicidio culposo
agravado y le ordenó prestar servicios a la comunidad y pagar una reparación civil
junto al Ministerio de Educación a cada una de las familias que perdieron sus
niños. En octubre de 2001 el representante de las familias interpuso un reclamo
ante el Séptimo Juzgado Especializado de Lima, la capital peruana, contra la
Dirección General de Salud Ambiental, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria y
Bayer. El abogado solicitó indemnización por daños y perjuicios.
En abril de 2007 la Jueza del 7º Juzgado Civil de Lima, de la Corte Superior de
Justicia, citó a una audiencia de conciliación, que fue postergada a petición
del Ministerio de Agricultura. La magistrada señaló que emitiría una resolución
que orientara el proceso y citaría a una nueva audiencia de conciliación a la
brevedad, lo cual no ocurrió. Bayer continúa sin pagar sus crímenes en
Tauccamarca.
La actuación de Bayer, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria y la Dirección
General de Salud Ambiental violó directamente derechos fundamentales
contemplados en la Constitución de Perú, como los que defienden la vida, la
integridad moral, psíquica y física y el libre desarrollo y bienestar de las
personas. La Red de Acción en Agricultura Alternativa recomienda además
que se analicen las violaciones a los derechos a la salud y al acceso a la
justicia de los pueblos indígenas.
El proceso judicial por el envenenamiento de los niños y la muerte de 24 de
ellos lleva ya siete años y no existe una sentencia para los acusados. Existe
una deuda social y ambiental que Bayer y los organismos estatales responsables
tienen que pagar.
Organizaciones denunciantes: Red de Acción en Agricultura Alternativa –
RAAA (Perú)